El día 25 de febrero de 2021, el Alcalde de Panguipulli, a través de la página Facebook Municipalidad y en su página web, junto al Departamento de Vivienda, “presentó el Plan Maestro habitacional, que (permitiría) construir 700 viviendas en la cuidad”.
Cuatro Comités de Vivienda serían los primeros beneficiados. Las viviendas se ubicarían en las catorce hectáreas que compró Seviu para dicho objetivo.
Siendo la vivienda un tema tan sensible para las familias y dado que en tiempo electoral se promete de todo, nos dimos a la tarea de investigar, para que la gente se pueda informar con amplitud sobre lo que se está prometiendo.
El anuncio deja enormes interrogantes:
¿Por qué a cuarenta días de la elección de Alcalde y Concejales, se hace un anuncio como este?
Esto respondería a la necesidad del Edil de recuperar algo de los votos que perdió y que ya se repartieron entre los otros cuatro candidatos a la Alcaldía, Sra. Sandra Añual, Sr. Pablo Sandoval, Sr. Rodrigo Manzano y Sr. Pedro Burgos, posterior al asesinato de seis disparos del artista callejero Francisco y joven en situación de calle, donde el país entero presencio, aparte del asesinato, el triste y vergonzoso espectáculo dado por el Alcalde de Panguipulli por televisión, con versiones contradictorias. Primero culpó a los artistas callejeros, luego, ante la respuesta de las redes sociales, condenando su actuar, cambió el discurso y disparó sin contemplación contra Carabineros, quedando entre dos frentes, la ciudadanía y la fuerza pública. En resumen, su actuar displicente, lejano a la realidad, sin empatía por una persona que yacía muerto, produjo un estallido social en Panguipulli que terminó con la Municipalidad y los Edificios Públicos incendiados.
Posterior a eso, inició una estrategia de victimización sin resultado positivo, junto con desaparecer de las Redes Sociales. Como respuesta a su baja popularidad, el Alcalde dio inicio a una batería de anuncios, desde luego, para dejar atrás los hechos de sangre de febrero de 2021. Entre ellos podemos mencionar promesas para distintas localidades, como, por ejemplo: Un nuevo gimnasio para Neltume, un estadio para Coñaripe, Construcción de drenaje para la Villa Esperanza de Choshuenco y por supuesto no podía faltar la vivienda como estrategia electoral. Cabe recordar las promesas de campaña de hace cuatro años atrás, entre ellas, un “Nuevo Hospital para Panguipulli”, la construcción de un Estadio para el Club Cóndor de Panguipulli, de eso nada sucedió.
PLAN MAESTRO HABITACIONAL DE PANGUIPULLI
¿Qué es un Plan Maestro?
Un Plan maestro no es más ni menos que un documento en el que los responsables de una institución, en este caso la Municipalidad de Panguipulli, dejan por escrito cuál será la estrategia a seguir en el medio plazo para conseguir un objetivo. En este caso, en una primera etapa, la construcción de 200 viviendas, para en el futuro llegar a 700.
El Plan Maestro, por lo general tiene una vigencia que oscila entre 1 y 5 años.
Entonces, lo que presentó el Alcalde, en dicha convocatoria a los dirigentes de los Comité de Vivienda, “no es un proyecto en curso, sino un plan de acción”, es decir, lo que en teoría haría para lograr el objetivo de la casa propia. En este sentido, entonces, llama la atención que la autoridad diga que se va a postular en un año o dos. Si es solo un plan, nada de eso podría suceder en al menos cuatro a cinco años. Plantear que, según las palabras del edil: «Trabajaremos en el proyecto inmobiliario para postular este año y si Dios lo quiere el próximo año podríamos iniciar las primeras 200 casas” es una falacia.
En este sentido y dado el estado de avance, tanto en las modificaciones del Plan Regulador (que permite construir un tipo de vivienda), así como la Factibilidad de Agua del terreno, al menos, es un engaño del Alcalde a las familias que necesitan una vivienda digna, esto, con razones puramente electorales. En ningún caso, de acuerdo al avance, se lograría en un plazo tan breve colocar el primer ladrillo o la primera tabla de una futura vivienda.
LOS PROCESOS A SEGUIR
A continuación, explicaremos el proceso extenso por el cual debe transitar la Municipalidad de Panguipulli para hacer que el sueño de la casa propia sea algo real y no una estrategia electoral para captar votos, pero antes algunas interrogantes:
1. ¿El Plan Regulador actual, aún en proceso de actualización, permite a corto plazo, la construcción de un conjunto habitacional en las 14 hectáreas comparadas por el SERVIU, ubicado fuera del Radio Urbano de la Comuna, frente al Liceo Altamira?
2. Si este terreno, que según el Plan Regulador está calificado como rural, ¿Entonces, como se pretende construir viviendas sociales urbanas y en tan poco tiempo?
3. ¿El terreno en cuestión tiene la aprobación de la pertinencia ante servicio de evaluación ambiental, que es el organismo que indicaría si es pertinente o no el ingreso del proyecto al SEIA (Sistema de evaluación de Impacto ambiental)?
4. ¿Cuenta con la consulta a Sernatur por ser Panguipulli zona de Interés Turístico (ZOIT)?
5. ¿El proyecto cuenta con estudio de impacto del sistema de transporte urbano, considerando la enorme congestión vehicular de nuestra ciudad?
Dadas estas interrogantes, de vital importancia para que el proyecto que anuncia el Alcalde se concrete en los plazos anunciados y no sea solo un volador de luces, se entiende que se habla de un proyecto con avances en lo que respecta a loteo, edificación y Urbanización, listo para presentar los antecedentes ante el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) y obtener el “Informe favorable de Construcción”. Si esto no fuera así, la tramitación requeriría, por parte baja, entre 6 y 10 meses. Resuelta esta etapa, comienza el ingreso del proyecto al Serviu y de acuerdo a los tiempos indicados en DSNº 49, esta etapa demoraría al menos dieciocho meses, siempre y cuando Essal entregue el vamos a la factibilidad. De otro modo, la tramitación ante el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, (Minvu), no se podrá concretar.
Entonces, regresemos al anuncio del Alcalde:
Textual: «Trabajaremos en el proyecto inmobiliario para postular este año y si Dios lo quiere el próximo año podríamos iniciar las primeras 200 casas».
Si somos serios, debemos calificar el anuncio del Alcalde, a lo menos como una acción populista y con fines meramente electorales. De acuerdo a lo presentado a los dirigentes por la autoridad, revisando con detención la información, en realidad esto sería solo una planificación y tendría muy poco de avances, es decir, “un deseo más que una realidad” En sus mismas palabras, sería una propuesta de Plan Maestro, que aún no cuenta con Factibilidad Sanitaria y no se sabe si hay financiamiento.
QUÉ ES Y PARA QUÉ SIRVE EL PLAN REGULADOR
Para la construcción de viviendas urbanas o rurales, existe un instrumento de planificación que se conoce como Plan Regulador…
Pero, ¿Qué es un Plan Regulador?
Básicamente, el “Plan Regulador” es un instrumento de planificación que orienta, fomenta y regula el desarrollo urbanístico del territorio de una comuna. Aplica normas para el uso espacios urbanos en las comunas, regulando las condiciones de higiene y seguridad. Determina a futuro en qué parte de una comuna se podrían instalar viviendas. Verá los temas en relación a límites urbanos, (urbano/rural), densidad, construcción, infraestructura, vialidad, usos del suelo, áreas verdes y equipamiento. Su objetivo es mantener la mayor organización posible de la comuna, permitiendo a la municipalidad tener claridad respecto a las mejores opciones para el desarrollo de proyectos, sin irrumpir en la calidad de vida de los habitantes.
El Plan Regulador tiene dos etapas: donde se estudian las áreas donde se plantean modificaciones, recopilando toda la información necesaria para proponer alternativas que mejoren las condiciones actuales. La segunda fase corresponde a la aprobación. Una vez que se aprueba el proyecto, la Secretaría Regional Ministerial de Vivienda y Urbanismo debe hacer las revisiones respectivas para asegurarse que se ajuste al Plan Regional Urbano-Territorial, para que finalmente se pueda llevar a cabo la aprobación definitiva por el Concejo Municipal; en este paso, el Alcalde junto al Concejo Municipal y la comunidad, aprueban el Plan Regulador Comunal en un proceso de participación democrático. El Plan Regulador deberá ser evaluado al menos cada 5 años, y se actualizará de considerarse necesario.
Entonces, si tan importante instrumento de Planificación Territorial, como el Plan Regulador, en Panguipulli, aún no se termina el proceso de actualización,
¿Cómo es que el Alcalde promete a los dirigentes de los Comité de Vivienda iniciar en un año o dos la construcción de las primeras 200 casas, si a todas luces no es posible?
Dicho eso. “consultados algunos Concejales aún en ejercicio, coincidieron en que el Plan Regulador aún no está terminado en su proceso de actualización”.
MÁS INTERROGANTES
Entonces, si el Plan Regulador Comunal no está actualizado, ¿Se pueden conectar las futuras viviendas a la red de agua potable, si el lugar de emplazamiento está fuera del área urbana de la ciudad?
“No se puede”, a menos que se traiga el agua de otro sector, lo que conlleva a múltiples problemas de suministro y control, ya que estando fuera del límite urbano pasaría a ser parte del área rural, por tanto, se tendría que dar una solución parecida a la que se le dio hace años a la Villa Palguín, ya que el Plano Regulador la dejaba fuera del área urbana. Se instaló un macro medidor, o bien sería una planta de tratamiento, como se hizo en la localidad de Neltume, ya sabemos cómo resultó todo eso.
El macro medidor, es un medidor único para todas las viviendas. Toda el agua que se consume se registra en él, después el pago del consumo se divide entre todas las viviendas, pagando en partes iguales. El problema es que, por distintas razones, no todos pueden o quieren pagar. En dicha experiencia, para resolver este problema, se instaló en cada vivienda remarcadores y así se le cortaba el agua a los que no pagaban. Otro de los problemas que surgen, es que, si surge un problema con el macro medidor, las viviendas quedarían sin agua. Es un problema para la gente y el municipio.
Actualmente, el Plan Regulador está en fase de actualización, así las cosas, fácil puede pasar un año o dos antes que se apruebe las modificaciones. En el proceso de revisión y aprobación, puede tener observaciones que subsanar para poder avanzar y ser una realidad que permita construir viviendas en dicho sector.
EL CIELO ESTÁ LLENO DE BUENAS INTENCIONES
Para muestra un botón. Hace un tiempo hubo un intento por parte del municipio de Panguipulli, de la administración actual, para llevar agua hacia el sector Palguín desde el APR Chauquen. Se trabajó en un proyecto para ampliar el área de suministro del mismo. El único e increíble detalle, es que después de elaborar el proyecto, lo que implica un gasto enorme en recursos humanos, profesionales y logística, se dieron cuenta que la matriz debía pasar por terrenos privados, cuando fueron a conversar con el dueño, este se opuso, ahí murió el proyecto, gastos de recursos públicos para nada.
SIN FACTIBILIDAD DE AGUA NO HAY VIVIENDAS
Resulta, al menos, dudoso que el Alcalde diga que en un año o más se comenzará la construcción de 200 viviendas sociales, cuando el proceso de factibilizar el terreno en cuestión para el uso de agua potable y alcantarillado es un proceso largo y donde se necesita varios cientos de millones para financiarlo. Lo único que se tiene claro, es que si no se factibiliza el terreno, no se puede construir, y si no se puede construir, no hay vivienda, ya que las familias no pueden vivir sin agua.
LOS PLAZOS
¿Cuánto puede, entonces, demorar factibilizar (realmente) el terreno donde dicen que se emplazarían 700 viviendas?
Considerando que hay que hacer un proyecto de ampliación de la red, luego el diseño, y un diseño para proyecto habitacional de esa envergadura, en ningún caso sería en dos o tres meses. Sumando a eso, factibilizar siete hectáreas es costoso. Cuando se tiene claridad del monto en dinero asociado, el municipio debe salir a buscar financiamiento externo. Entonces, el hecho de tener un proyecto consolidado, estamos hablando de un año y medio a dos, como mínimo, solo para lograr la factibilidad sanitaria. Es decir, cualquier construcción de vivienda, sea una o doscientas, no partiría sino de cuatro a cinco años como mínimo, puede ser más.
FACTIBILIDAD DE AGUA
Ante la interrogante que se abrió, (luego del anuncio) del Alcalde, hay que decir que nada indica que haya factibilidad de agua, ya que como señala el Alcalde lo que existiría, según sus palabras, es una PRE FACTIBILIDAD. Bueno ese concepto, la verdad no existe.
Para ser rigurosos en la información, todo terreno tiene factibilidad de agua. El problema es el financiamiento de dicha factibilidad. Cuánto dinero costará financiar llevar el agua de un sector a otro, cuánto cuesta hacer una red de tratamiento. Para hacer historia y de acuerdo a los datos obtenidos, hace quince años aproximadamente, factibilizar un terreno costaba alrededor de 600 millones de pesos, eso sí dependiendo de las dimensiones del paño (terreno), lo que implicaba hacer matrices, impulsores de agua, sin contar con los trabajos de alcantarillado, todo eso implica, en simple, factibilizar el terreno, para recién iniciar los trabajos de construcción de la primera casa con agua potable.
Entonces, suponiendo que efectivamente, el municipio hubiera avanzado en este proceso, la pregunta sería:
¿Cuánto es el monto en dinero que el municipio de Panguipulli tiene priorizado para factibilizar el terreno en donde según el Alcalde se comenzarían a construir las primeras 200 casas para doscientas familias, dejando todo listo para un total de 700?, ¿Está ese dinero realmente?
EL TERRENO Y LAS PROMESAS ELECTORALES
Hoy donde se pretende construir las viviendas en cuestión, es un terreno agrícola, donde pastorean vacas. No existe nada aún que pudiera decir que en un año más se comienza a construir. Para ser claros, el problema, no es la factibilidad propiamente tal, sino el costo y el tiempo que se demora, sin contar con todas las etapas administrativas que se debe cumplir. Por tanto, no se puede ofrecer 700 casas y factibilizar el terreno para las primeras 200. No funciona así. Si lo planteó así el Alcalde, les está mintiendo o tergiversando la información a las familias. Para esto, se necesita que el municipio salga a conseguir recursos extraordinarios para financiar esta etapa inicial del proyecto habitacional. Por tanto, cuando se habla de 700 casas, se puede leer como una promesa de campaña, nada más, como lo fue en su momento el anuncio electoral de la Construcción del Estadio del Club Cóndor de Panguipulli, que nunca se concretó, pero que reditó votos, a costa de la ilusión de la gente.
Podemos concluir que se está engañando a los vecinos con promesas electorales y haciendo un anuncio de construcción de viviendas, que en ningún caso podrán construir antes de cinco o seis años, ya que los procesos de actualización de Plan Regulador, que no está finalizado, no lo permite, además que la factibilidad de agua potable es un proceso largo y complejo.
Se recomienda a los dirigentes informarse en profundidad de lo que se les presentó como la posibilidad de acceder a una vivienda en un tiempo relativamente breve.
