Reflexión de Mons. Stegmeier: “La Constitución, la subsidiaridad y el estatismo”

En el proyecto constitucional hay un concepto de Estado que va a afectar la vida de los chilenos y a las instituciones que le son más vitales, como son, entre otras, la familia y los establecimientos educacionales.

Están en juego dos conceptos de Estado: estatista o subsidiario. El Diccionario define el estatismo como la “preeminencia del Estado en la actividad social, económica o cultural”. Una lectura objetiva del texto evidencia ser un proyecto de constitución estatista. El Estado asume el protagonismo en todos los aspectos de la vida social, incluso prevaleciendo sobre decisiones privativas de las personas.

No hay que olvidar que “el principio, el sujeto y el fin de todas las instituciones sociales es y debe ser la persona humana”(Catecismo de la Iglesia Católica Nº1881). Pero “una intervención demasiado fuerte del Estado puede amenazar la libertad y la iniciativa personales. La doctrina de la Iglesia ha elaborado el principio llamado de subsidiaridad. Según éste, una estructura social de orden superior (en este caso, el Estado) no debe interferir en la vida interna de un grupo social de orden inferior, privándole de sus competencias, sino que más bien debe sostenerle en caso de necesidad y ayudarle a coordinar su acción con los demás componentes sociales, con miras al bien común”(Nº 1883).

La devaluación del principio de la subsidiaridad conduce al estatismo y a una concepción individualista de la persona. “Hay una tendencia a una reivindicación siempre más amplia de derechos individuales, pero que esconde una concepción de la persona humana desligada de todo contexto social y antropológico”. Pareciera que en el proyecto constitucional el individuo está solo y aislado, referido únicamente a sí mismo y al Estado.

Se devalúa la dimensión social de la persona, sobre todo la esencial e intrínseca dependencia de los esposos entre sí en la institución natural del matrimonio y de ellos con los hijos en la familia.

+Mons. Francisco Javier Stegmier.

Obispo de Villarrica.